Inicio Foros Formación cofrade Santoral 21/04/2018 San Simeón de Ctesiphon, obispo y mártir.

  • Este debate está vacío.
Viendo 1 entrada (de un total de 1)
  • Autor
    Entradas
  • #10506
    Anónimo
    Inactivo

    Santos: Anselmo de Cantorbery, obispo y doctor de la Iglesia; Anastasio sinaíta, obispo; Román Adame Rosales, sacerdote y mártir; Simeón, Abdécalas, Ananías, Apolo, Alejandra (Sandra), Arador, Fortunato, Félix, Silvio, Vidal, Apolo, Isacio, Crotato, Timoteo, Pusicio, mártires; Conrado Parzha (sacristán), confesor.

    San Simeón de Ctesiphon, obispo, y compañeros mártires.

    De nuestro santo de hoy, sabemos bastante poco pues sus actas son bastante escuetas, aunque son genuinas y redactadas por San Marutas. También escribe de él Zosomeno en sus adiciones a la «Historia Eclesiástica».

    Era hijo de un general, y había sido discípulo de San Papías de Ctesiphon, que lo había ordenado presbítero y obispo de Seleucia y Ctesiphon para ayudarle. Cuando Papías murió, Simón tomó las riendas de la sede. En 316 envió a un presbítero en su nombre al Concilio de Nicea.

    En 344 fue acusado por el rey Sapor de ser amigo del emperador romano Constancio II y mantener correspondencia en secreto con él. Por esta acusación, Sapor la emprendió contra todos los cristianos, ordenando la ejecución de los presbíteros y seglares, la destrucción de las iglesias y de todo lo que oliera a cristiano, teniéndolos por traidores. Simeón, cargado de cadenas, fue llevado ante Sapor, que intentó que adorara al sol, a lo que el santo se negó, y por ello fue condenado a una larga prisión junto a otros 100 hombres cristianos, entre obispos, presbíteros, diáconos y seglares.

    En la prisión, habría continuado de no haber convertido a la fe a Ustbazan, padre putativo de Sapor, que había sido cristiano y había apostatado. Por esta acción, el Viernes Santo de 344 fueron todos degollados o decapitados, mientras el santo les exhortaba al martirio.

    Entre los que padecieron, las Actas mencionan a los presbíteros Abdbcalas y Ananías por esta circunstancia: Pusicio, superintendente del rey, animó a estos presbíteros a permanecer firme, y como fue visto por los soldados, inmediatamente, le abrieron la garganta de un tajo, y sacándole por ahí la lengua, le dejaron padecer hasta morir. Luego martirizaron a una hija suya, virgen consagrada a Dios.

Viendo 1 entrada (de un total de 1)
  • Debes estar registrado para responder a este debate.